Mendel, el de los libros

 

Narra la historia de Jakob Mendel, un judío de origen ruso, el librero de viejo más conocido y hábil en Viena a la hora de conseguir cualquier ejemplar por raro que fuera. Un hombre con una excepcional memoria, un amante de los libros, una de esas personas que viven por y para los libros, que dedica su tiempo y su dinero en aprender y conseguir ejemplares únicos.

Había establecido su lugar de trabajo en el café Gluck en Viena y allí se pasaba los días respetado por todos y gozando de privilegios que ningún otro cliente era capaz de merecer. Y es que los lectores y estudiantes que acudían a buscar el consejo o el ejemplar remoto que solo Mendel encontraría, aumentaban la clientela del café. Sin ser un personaje agradable “a la vista”, sí lo es al corazón.

Así transcurre su vida, sentado en el rincón del café, esperando, mientras lee, a sus clientes, que acuden a él en busca de ayuda o consejo.

 

Pero un día todo cambia......

 

Él, que tanto sabe de libros, que poco sabe de la vida. 

En este pequeño libro se tratan temas muy interesantes como la guerra que marca el final de una época, los campos de concentración, la relación de los judíos con el resto de la población, la persecución a la que fueron sometidos y también la monotonía y la rutina.

Las descripciones de Stefan Zweig son tan precisas que no cuesta nada imaginársele trabajando en su mesa, totalmente absorto en sus libros ya que Mendel vive en su propio mundo, ajeno a todo lo que sucede a su alrededor, incluso a la declaración de una guerra.

La prosa de Stefan Zweig es elegante, clara y sencilla, llena de sensibilidad, su historia es intensa y conmovedora.