La biblioteca de la medianoche

 

A "La Biblioteca de la Medianoche" llegas justo antes de morir y es donde tienes una última oportunidad para poder evitar el fatal desenlace, es como un purgatorio. Cuando llega Nora, la protagonista principal, tiene la oportunidad de probar otras vidas que podría haber vivido y de comprobar cómo habrían cambiado las cosas si hubiera tomado otras decisiones.

Comienza muy bien, engancha en sus primeras páginas, sigue fluyendo y hacia la mitad empieza a desinflarse. 

La historia se aplana y se vuelve repetitiva, aún así hay que reconocer que es una novela distinta. 

El estilo es sencillo y ágil y los capítulos cortos y variados.

Es el tipo de libro que contiene un mensaje implícito, que pretende hacerte reflexionar, te anima a vivir y a saber encajar los fracasos.

Matt Haig (1975) es un novelista y periodista inglés. Es autor de títulos de no ficción superventas como "Razones para seguir viviendo" o "Apuntes sobre un planeta estresado", pero también ha escrito seis novelas, entre ellas "Cómo detener el tiempo", "Los humanos" y "Los Radley"; y sus obras, incluidos varios libros infantiles, han vendido más de dos millones de ejemplares solo en Reino Unido y se han traducido a más de cuarenta idiomas.

Haig tenía 24 años y vivía en Ibiza con su esposa Andrea y un día, sintiéndose totalmente impotente ante unos pensamientos oscuros que le impedían ver un futuro para sí mismo, se paró al borde de un acantilado preparado para saltar.

De aquella experiencia y de su regreso a la vida escribió en "Razones para seguir viviendo".

El autor cree en "el poder terapéutico de las palabras" y en su caso "escribir fue una medicina brutal", porque le resultaba difícil articular sus sentimientos y cuando pudo plasmarlo en palabras sobre el papel creyó que podía gestionarlo.