Terra Alta
La historia comienza con el brutal asesinato de un matrimonio de ancianos, quienes eran los propietarios de una empresa gráfica, con sucursales en medio mundo. Los hechos apuntan a que los asesinos son cercanos a la familia, por lo que toda la comisaría se vuelca en el caso. Pero no hay pruebas fehacientes como para resolverlo rápidamente.
El autor nos plantea un relato en dos planos temporales que se van alternando y entrecruzando a lo largo del texto. Un primer plano es el relato de la investigación criminal a raíz del asesinato del matrimonio Adell, con un narrador en tercera persona y en tiempo presente. Por otra parte, un relato en tercera persona y en tiempo pasado es el que el autor utiliza para contarnos el pasado del protagonista. Este relato retrospectivo resulta más interesante incluso que el propio relato de la investigación criminal.
“Terra Alta” es mucho más que una novela negra, es una profunda reflexión sobre la condición humana. Nos presenta un libro apoyado en una imagen especular con “Los miserables” la obra maestra de Victor Hugo.
El protagonista de la novela, Melchor Marín, ha transformado el libro
de Víctor Hugo en su manual de iniciación que marcará su vida y sus acciones.
Siempre se identificó con Javert, ese policía justiciero cuya única finalidad
era la detención de Jean Valjean. Esto lo llevó a hacerse policía con el
objetivo de vengar la muerte de su madre, Rosario, una prostituta cuya muerte
quedó en el cajón de casos sin resolver.
El nombre de la comarca donde se desarrolla la acción da título al libro. Una comarca en la que nunca pasa nada, en la que todos son pobres menos los Adell, pero de la que nadie que vive allí quiere irse.
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